FBI se ha marcado como objetivo tener barra libre en servicios como Gmail, Google Voice y Dropbox para poder espiar nuestras conversaciones con total impunidad
Parece ser que el FBI no se encuentra demasiado cómodo sabiendo que debido al auge de las llamadas por internet y los servicios de mensajería instantánea cada vez tiene más complicado poder espiar las conversaciones de aquellos a quienes considera sospechosos o peligrosos, algo que ha venido haciendo por los siglos de los siglos. Principalmente en el ámbito del terrorismo internacional, que es una de sus responsabilidades.
Así que ni corto ni perezoso el FBI se ha marcado como objetivo tener barra libre en servicios como Gmail, Google Voice y Dropbox para poder espiar nuestras conversaciones con total impunidad. Tanto debate sobre la privacidad en la red para nada; el FBI se lo pretende cargar de un plumazo. En aras de nuestra seguridad, claro.
Hoy en día el FBI tiene instalados equipos de vigilancia en las operadoras telefónicas que permiten interceptar llamadas en tiempo real. Pero Internet les ha complicado el panorama. Tomemos el ejemplo de Gmail, que transmite los mensajes utilizando cifrado SSL, por lo que aunque el FBI pudiera interceptarlos no podría descifrarlos.
Ante este hándicap, el FBI ha manifestado durante una conferencia celebrada recientemente en Washington su interés por encontrar una solución a esta situación y poder espiar en tiempo real las conversaciones en los servicios anteriormente mencionados. ¿Que lo que pretenden es un poco ilegal? Nos os preocupéis porque ya han anunciado que realizará “grandes esfuerzos” para conseguir el marco legal que les permita acceder a cualquier comunicación que se realice a través de la red. Quiere convertirse en el espía de internet.